Esta foto sin fecha muestra a investigadores de la Universidad de Tianjin realizando experimentos de medición optoacústica de terahercios y adquisición y análisis de datos en Tianjin, norte de China. (Xinhua.)

Un equipo de investigación chino ha desarrollado un novedoso sistema que permite la monitorización no invasiva y dinámica de los niveles de sodio en sangre, lo que responde a necesidades críticas en la gestión de la deshidratación, las enfermedades renales y los trastornos neuroendocrinos.

Los resultados del estudio, realizado por la Universidad de Tianjin, se han publicado recientemente en la revista internacional Optica.

La radiación de terahercios, situada entre las bandas de microondas e infrarrojo medio, ofrece ventajas únicas para la detección biomédica: bajo consumo de energía, da?o mínimo a los tejidos y alta sensibilidad a los cambios moleculares. Sin embargo, su fuerte absorción por el agua y su limitada capacidad de penetración en los tejidos biológicos han obstaculizado las aplicaciones prácticas.

Los innovadores sistemas optoacústicos de terahercios del equipo superan ambos retos emitiendo ondas de terahercios a frecuencias resonantes con los iones de sodio, pero eliminando las se?ales de absorción de agua, según el artículo.

Esto excita selectivamente las vibraciones del sodio, generando ultrasonidos que son captados por transductores para su análisis. La conversión en ondas acústicas reduce la dispersión y la atenuación, lo que permite una penetración más profunda a través del músculo y el hueso, así como una captura satisfactoria por los transductores de ultrasonidos.

Bajo la dirección de Tian Zhen, catedrático de la Universidad de Tianjin, el equipo logró una monitorización continua del sodio sin etiquetas con una precisión validada en ratones vivos y voluntarios humanos. Su método promete ser una alternativa indolora a las pruebas con agujas, con potencial para su adopción clínica.

?El sistema es prometedor más allá de la monitorización del sodio?, afirma Li Jiao, investigador del equipo. ?Al aprovechar los espectros de absorción característicos de los terahercios, podría detectar potencialmente otros iones como el potasio y el calcio, así como biomoléculas como azúcares, proteínas y enzimas, lo que ampliaría significativamente su utilidad clínica?, explicó.