La dieta picante es beneficiosa para el corazón, según un estudio

Es posible que los habitantes de la provincia de Sichuan, amantes del picante, hayan desvelado sin querer un secreto para la salud.

Una investigación realizada a lo largo de 21 a?os en la que participaron más de 50.000 habitantes de Sichuan ha revelado que las personas que comen chiles con regularidad tienen un riesgo significativamente menor de desarrollar enfermedades cardiacas y cerebrales en comparación con las que rara vez o nunca comen picante.

Según el estudio, publicado recientemente en la revista Chinese Journal of Epidemiology, las personas que comen alimentos condimentados con chiles seis o siete días a la semana tienen un riesgo un 11 % menor de desarrollar problemas cardiovasculares y cerebrovasculares, como la coagulación de la sangre y el estrechamiento del canal medular.

Chen Xiaofang, profesor asociado de la Facultad de Medicina de Chengdu y uno de los autores del estudio, dijo que los investigadores utilizaron datos de encuestas recogidas desde 2004 entre 54.859 residentes de 30 a 79 a?os de Pengzhou (Sichuan) para analizar factores como la frecuencia de la ingesta de chile, el nivel preferido de picante, las formas preferidas de chile en la dieta y la edad a la que se inició el consumo regular de chile.

Su investigación demostró que las personas que comen chiles seis o siete días a la semana tienen un 14 por ciento menos de posibilidades de desarrollar una cardiopatía isquémica, un 12 por ciento menos de riesgo de enfermedades cerebrovasculares y un 15 por ciento menos de sufrir un ictus isquémico.

Las personas que prefieren la comida ligeramente picante tienen un 7 por ciento menos de probabilidades de desarrollar enfermedades cardiovasculares y cerebrovasculares, mientras que el riesgo entre los que les gusta el picante fuerte es un 9 por ciento menor. Curiosamente, quienes consumen comida moderadamente picante tienen un 14 por ciento menos de riesgo de padecer estas enfermedades.

?Las razones exactas de los riesgos relativamente menores entre los amantes del picante moderado siguen sin estar claras, ya que los datos actuales carecen de variables críticas como la frecuencia diaria de consumo de chile, la cantidad consumida cada vez y el umbral individual de tolerancia al picante?, se?aló Chen.

Se?aló que el estudio descubrió que el consumo de chiles en cualquiera de sus formas, incluida la salsa de chile, el aceite de chile o los chiles frescos o secos, se asocia en general con efectos protectores.

Las Directrices Chinas para la Prevención y el Tratamiento de la Hipertensión (revisión de 2024), publicadas en julio del a?o pasado en la Revista China de Hipertensión, se?alaban que el consumo regular de comida picante puede ayudar a prevenir la hipertensión o tensión arterial alta.

Citando estudios de eruditos chinos, las directrices afirman que la capsaicina -el compuesto activo que hace picantes a los chiles- puede dilatar los vasos sanguíneos y reducir la presión arterial, ofreciendo una importante base científica a las ventajas protectoras del picante contra las enfermedades cardiometabólicas.

Chen Xiaofang, médico jefe adjunto del Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Pengzhou y coautor del estudio, afirmó que, si bien los resultados sugieren que el consumo de chiles es útil para prevenir enfermedades cardiovasculares y cerebrovasculares, actualmente no hay pruebas de que la comida picante pueda revertir las afecciones existentes.

A?adió que las personas sin enfermedades subyacentes pueden consumir una cantidad razonable de comida picante como parte de una dieta equilibrada, pero deben recordar que el consumo de chile no puede sustituir a los tratamientos médicos necesarios.

El estudio fue realizado por investigadores de instituciones como la Escuela de Salud Pública del Colegio Médico de Chengdu, el Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Pengzhou, el Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Sichuan y el Departamento de Epidemiología y Bioestadística de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Pekín.

Wu Gang, residente en Sichuan y amante de la comida picante, calificó los resultados de la investigación de ?sorpresa agradable? y dijo: ?Ahora me gustarán más los chiles?.

Otra residente, apellidada Tang, dijo que los hallazgos son muy prometedores, pero que preferiría seguir siendo cauta con el nivel de picante en su dieta diaria. ?Me da miedo tener dolor de estómago?, a?adió.