No se han observado signos de reducción del consumo de café en Estados Unidos desde la subida de los aranceles en agosto, pero sí el incremento de los precios, lo que obliga a los consumidores a pagar una factura mucho más elevada, declaró a los medios un representante del consejo de exportadores de café de Brasil, Cecafé.

Las cifras preliminares de la entidad muestran que, entre el 1 y el 25 de agosto, Brasil envió 193 900 sacos a Estados Unidos, un descenso del 46,6 % con respecto al mismo periodo de 2024. Por el contrario, las ventas de Julio rondaron los 450 000 sacos.

Eduardo Heron, director técnico de Cecafé, apuntó que, a pesar del gravamen, ?no hay indicios de un menor consumo en Estados Unidos. ?El arancel resulta en un aumento de los precios, y son los consumidores estadounidenses los que pagan?, a?adió.

Estados Unidos es el mayor consumidor de café del mundo y Brasil es su principal proveedor, con una cuota de mercado del 33 %. En 2024, este vendió 8,1 millones al país norteamericano.

Marcos Matos, director ejecutivo de Cecafé, indicó previamente que, si bien los aranceles tendrían un impacto considerable en el comercio exterior de Brasil, el efecto negativo en la economía estadounidense también sería grande. Agregó que cada dólar de café importado genera 43 dólares para la economía estadounidense y que alrededor del 76 % de locales lo beben a diario.

Analistas y representantes del rubro manifestaron que los exportadores brasile?os también podrían redirigir su mirada a otros mercados. China, uno en rápida expansión, autorizó hace poco la operación de 183 exportadoras brasile?as más a partir del 30 de julio, reportaron los medios.